Cuando Don Miguel de Cervantes hizo aparecer en la ciudad de Toledo el manuscrito de Cide Hamete Benengelí, dando comienzo a la segunda parte de su inmortal obra Don Quijote de la Mancha, ¿sabría que años antes otro genio y en esa misma ciudad pintaba El entierro del Señor de Orgaz?.
Estos marcapaginas, alusivos a todo ello, se los compré en esa ciudad, a un Don Miguel que, además, me los rotuló por el reverso con una bella frase, y que por aquello de no faltar a verdad, se llama Paco del Pozo (adjunto sus datos).
Éstos son de envidia.
ResponderEliminar¡ Maravillosos!
Entiendo que se pueden pedir...Voy a informarme.
¡ Feliz día!
Luisa
Tú no has encontrado en Toledo el manuscrito de Cide Hamete Benengeli, pero ¡menudos marcapáginas has localizado de Paco del Pozo! A ver si, como en Don Quijote, con el tiempo, hay una segunda parte tan bonita como esta...
ResponderEliminarApertaSS
Justa
Obras de arte, sin duda, con esa rotulación tan especial . Una entrada magistral y es que Cervantes se lo merece.
ResponderEliminarUn abrazo
Los quijotes: extraordinarios. La frase: la comparto totalmente. Los mps de Toledo y el Greco: la guinda de tan fantástica entrada.
ResponderEliminarSaludos,
Charo.
Vaya entrada completa. Una maravilla. Conxi
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