El pasado sábado 27 de Enero se conmemoraban los 73 años de la liberación del campo de exterminio de Auschwitz.
Sirva como pequeño homenaje a los que allí fueron exterminados mi deseo de que cualquier guerra se pudiese librar en el incruento campo de batalla que representa un tablero de ajedrez, y que el alambre de espino que un día sirvió para separar ideologías, quede reflejado exclusivamente en estos inofensivos marcapaginas.
Muy bonita la entrada, creo que tus deseos son los de muchos.
ResponderEliminarMontse
¡Y dices que no te gusta la poesía! Tus deseos, que son los de muchos, los has impregnado de poética y sensibilidad.
ResponderEliminarAbrazoSS
¡ Me pone enferma el alambre de pinchos!
ResponderEliminarEse calcetín rojo abandonado es la pura imagen de la desolación...Es como si llorase por todas las ropas que se han quedado sin cuerpo.
Bueno...Estoy un poco especialita hoy...
Abrazos
Luísa